CAPITULO 3: ESTUDIANDO EL PIR…EN VERANO

Muy buenas a tod@s:

Pues nada…parece que, ahora sí, ha llegado el verano. El calor, las calles que empiezan a vaciarse lentamente, las siestas, el olor a cloro de piscina o a salitre marino, las terrazas llenas a partir de las ocho de la tarde….y yo estudiando el PIR. Posiblemente esta época del año es la más dura para cualquier opositor que se precie. Además del clima-que no ayuda precisamente a mantener la concentración durante más de 5 minutos en cualquier cosa que no sea una bebida fresca, una sombra o el aire acondicionado-, el ritmo general de la calle disminuye progresiva e inexorablemente. Las bibliotecas, que habían estado llenas hasta ahora-y ya sabemos lo que decía nuestro compañero Festinger sobre la hipótesis de la similitud: en situaciones aversivas, preferimos estar acompañados por semejantes-, van quedándose vacías y nos cuesta encontrar a alguien con nuestra misma cara de resignación. Hasta los centros comerciales parecen menos bulliciosos cuando pasamos por ellos de vuelta a casa al salir de la biblioteca vacía. Y buscamos consuelo en las caras de quiénes trabajan a esas horas, como pensando: “no soy la única persona que está “perdiéndose” el verano”. Porque estamos perdiendo el verano….¿o no? Pues no.

Porque no se trata de “perderse” nada. Se trata de reorganizarnos para aprovechar lo mejor posible el tiempo, combinando preparación y descanso. Sí, hay que descansar…es OBLIGATORIO. Las ideas obsesivas que nos asaltan, del tipo: “no puedo descansar, no puedo perder el tiempo, tengo que aprovechar cada minuto…”, son una trampa mortal. Estamos a mitad de camino y tenemos que reponer fuerzas, porque a partir de septiembre empieza el acelerón final. Y si llegamos a esa fecha exhaust@s…nos quedaremos sin fuelle antes de cruzar la meta. Así que unos días de VACACIONES. Sin CeDe Memory, sin CeDe Exam, sin CeDe Go….sin nada que suene remotamente al PIR.

Y el resto del verano, vamos a intentar estudiar de la forma menos gravosa posible. Aprovechad para recuperar retrasos-aquellos que vais a clases presenciales y hayáis perdido un poco el ritmo de las clases o l@s alumn@s a distancia que hayáis empezado un poco más tarde a estudiar-, para estudiar los exámenes comentados, para repasar las materias ya estudiadas mediante exámenes de área, para completar esquemas de las áreas que nos resulten más interesantes…se trata de remar a favor del viento y no en contra. Puede que no sea el mejor momento para estudiarme los temas más pesados o los más temidos o los más odiados…

El verano tiene sus cosas buenas. Los días son mucho más largos, así que podemos aprovechar el final del día para hacer algo de deporte, para ver a gente querida o para ir al cine. Qué estamos estudiando en verano…sí. Pero para cumplir un sueño. Para acceder a la mejor formación posible que nos convierta en especialistas en Salud Mental. Para poder ejercer la mejor profesión del mundo con los mejores conocimientos posibles. Y nadie dijo que fuera a ser fácil. Pero merece la pena!!!

Seguimos en contacto equipo!!!!

 

 Mª Rosa González Díaz – Profesora Tutora Cursos PIR CeDe